El imaginario colectivo alberga multitud de ideas erróneas en relación con el antiguo Egipto, pero con el paso de los siglos hay nuevos datos que cambian mucho de lo que creíamos saber.
Aunque tengamos la imagen del Titanic como un transatlántico de lujo, lo cierto es que muchos de sus pasajeros se embarcaron hacia América en busca de nuevas oportunidades.
Sus vecinos la enterraron con la intención de que nunca volviera de entre los muertos. Ahora, un equipo de investigadores ha dado vida a su rostro para contar su historia.